La llegada de Ramiro Gandola al Superbike BR significó, no sólo la experiencia de participar

de un certamen extranjero, sino que expuso, de manera explícita, las cualidades del

argentino junto a su grupo de trabajo.

    El certamen brasileño se desempeña, casi en su totalidad, en el circuito de Interlagos. Si

bien la teoría indicaría que, una vez adaptado al trazado, no habría sorpresas, lo cierto es que

una pista muy difícil

     Hasta allí fue con su moto campeona. La BMW S 1000 RR, que se destaca por su

tránsito en virajes y posee elementos casi de serie (salvo escapes y electrónica).

Detalle no menor con un reglamento que permite preparación libre en el motor.

     Apenas llegó le “marcaron la cancha”. Por una cuestión presupuestaria, había llevado un

juego de neumáticos desde nuestro país (mismo compuesto) y los colocó en la prueba “extra

oficial” del jueves. Le terminó saliendo cara la jugada ya que lo sancionaron y le quitaron la

pole. Por si esto fuera poco, tuvo una segunda lección en carrera. Recuerdan cuando, un par

de párrafos más arriba, hablé de la complejidad del autódromo de San Pablo? Es el asfalto. No

avisa cuando está por desaparecer el grip. Una vez que pierden la moto es casi imposible

recuperarla. Gandola fue agresivo para remontar posiciones y terminó en el piso.

      Duro inicio, pero aún faltaba más. Por consejo de los técnicos del proveedor de

gomas, estaban saliendo con presiones más elevadas de lo que el equipo quería.

Conclusión, caída y moto rota en el warm up. A partir de allí, hubo una charla y pudieron rodar

con menos libras.  

Con todo esto llegaba el momento de largar la segunda final donde daría una

muestra de lo que es capaz. Alguien conocía allá al Ramiro Gandola de los domingos? Aquel

que puede circular más rápido que en clasificación y batallar, ferozmente, en un alto nivel de

exigencia, con muy pocos errores.

     Pedro Sampaio, actual dueño del título de la categoría, se impuso pero denotó un

reflejo de las armas que disponía cada uno.

     Por el lado del vencedor, integrante de un team oficial, monta una Honda CBR 1000 RR-R,  

que es la “reina” del último sector, de aceleración plena.

     En el caso de Gandola, domina con claridad el parcial “trabado”. Como dirían en la escuela:

“Tarea para la casa: mejorar el S3”

<

Momento de “Interlagos III” donde tanto Gandola como Sampaio llegan con armamento

renovado para otra “guerra”. Estrena otra S 1000 RR que eroga 8cv más y es 16kg más liviana

(208 vs 192kg). Obviamente, reemplazan la electrónica y el sistema de adquisición de datos.

     Luego de trabajar en la puesta a punto junto con Mauro de PowerInyeccion en las

distintas sesiones cronometradas (había que transmitir la potencia), pudo quebrar la barrera de

los 23 segundos en el T3.

     Para darles una idea, del sinuoso se sale en 2da, sube dos marchas rápidamente para

afrontar la última variante de izquierda previa al curvón que te lleva a la recta final. Ramiro

traza de manera un poco distinta a sus rivales para poder salir con la moto más derecha (ellos

la tumban más) y aplicar mejor la potencia.

     Otro de los aspectos que trabajaron es en la transmisión, llegan al fondo del rectilíneo en

quinta y no sexta. Justamente, emplean relaciones largas para dulcificar la entrega.    

     Su rival no se quedaba atrás. Curiosamente (digo esto porque en “la final” está lejos de

repetirlo), en qualy, lograba que la Honda gire en las curvas y baje los 50 seg el S2. Es más,

clavaba 01:37.1 para la pole contra 01:38.0 de Gandola en la Qualy, pero faltaba algo …..claro,

el domingo!

     Perfomace pareja, ambos por arriba del 01:38.0, y llega el momento que

más me gusta, cuando se dejan de lado los cronómetros y entra el juego

el “mano a mano” y el psicológico. La zona de confort del chaqueño. El duelo se definió para el

debutante en lo trabado.

 Cuarto y, por ahora, último round. Clima inestable y momento de adaptar rápido el set up.

Como dije previamente, debido al suelo, pareciera que toda la experiencia adquirida en las

anteriores ediciones no sirviese.  Tiene mucha actividad Interlagos, hay competencias de toda

índole, y varía muchísimo las condiciones.

     A trabajar de nuevo. Es cierto que, a nivel desarrollo, todavía tienen bastante por

progresar en la nueva unidad. No es fácil, Gandola sólo ensaya los fines de semana que se

lleva a cabo el torneo. Ellos, en modo “Track Day”, tienen la posibilidad de girar martes y

viernes entre las distintas fechas. A su vez, emplean 9 juegos de cauchos contra 5 de nuestro

representante (viernes última salida, sábado primera tanda, superpole, tanques

llenos y race).

Retornamos a la acción. Cabe mencionar montó frenos de competición aunque no los pudo aprovechar al 100% por

las condiciones del piso No hay más tiempo, se apaga el semáforo. Ambos exponen lo

mejor, ya conocen sus fortalezas y debilidades. Una película similar a la anterior.

     El enfrentamiento fue aún más cerrado. Si bien Gandola se siente cómodo persiguiendo, lo

doblegó para evitar que imponga otro ritmo. . La diferencia fue que Sampaio

no perdió rendimiento una vez que fue superado. Al contrario, a dos giros del final tomó el

liderazgo, pero fue el del RXP quien luego volvió a imponerse a poco del cierre.

Tres duelos dos victorias, poniendo no sólo conducción. Parecen estar guionadas pero

no son ficción. Son el resultado de un trabajo en equipo, investigación, desarrollo, que luego

es llevado a la “arena” por un guerrero.

Fernando Chiesa

Muchísimas gracias Ramiro Gandola (@ramirogandola1 y @picadasramirogandolateam) y Mauro Rodríguez (@mauropwr, www.pwrinyeccion.com) por la buena onda y predisposición y las fotos 🙂