
La segunda fecha del Campeonato Argentino de Velocidad, se llevó a cabo en el
autódromo de Centenario, Neuquén, donde en la categoría Supersport 300 se impuso
Leandro Bagnarelli.
Personalmente, sin referencias previas, tenía una incógnita apenas empezaron las primeras
salidas de las motos a pista respecto al registro que desplegarían.
Con un asfalto frío, las cifras que entregaban los competidores era dispar. En la
Práctica 2, Agustín Donatti realizó un stint largo con un 01:34.4 como el mejor y 01:35.0 de
promedio. Atentos a esos números.

Otros de los que se acomodó entre los de adelante fue el del René Zanatta Sport (#31),
quien declaró estar contento por cómo impactaron los trabajos en su unidad, y las
distintas modificaciones que iban realizando en la puesta a punto. Había logrado mucha
comodidad y disfrutó sobre ella.
Luego, en el resto de las sesiones, hubo varios que se acercaron a esa marca. Cuál sería
el ritmo con el que se disputaría?
Se apagó el semáforo y, obviamente, empieza a formarse un pelotón. Comienza la pelea y el
primero en desmarcarse, como había anunciado en las tandas previas, fue Donatti. Se cortó
con una media de 01:34.0 contra 01:34.5 de sus oponentes.
Su idea era «tirar» al máximo por una vuelta más y, a partir de allí, regular el tránsito.
Lamentablemente, una caída derrumbó sus ilusiones. Si bien hay aspectos por trabajar, el
punto de partida (la perfomance del conjunto) es para destacar y, también, la autocrítica
realizada por el rafaelino. Podría haber puesto cualquier excusa, pero se hizo cargo.
A partir de ahí, nace una nueva prueba en donde, de 25 que ocuparon la grilla,
había 10 con potencial para alzarse la victoria. 13 marcaron una vuelta rápida más veloz que
Leli Bagnarelli (nunca quebró la barrera del 01:34.0 y el récord fue de 01:32.9 de Grasa).
¿Cómo se creaba esa brecha? Saliendo de la “uno” había mucho viento en contra, el
que lograba un buen rebufo hacía diferencia. ¿Cómo hizo para triunfar?

Faltaba todavía la mitad de la distancia y el grupo comenzó a dar guerra. Cada uno adoptó
un rol. No es fácil transitar allí. En el caso del vencedor, prefirió mantenerse cauto, no
castigar su Yamaha YZF-R3 prematuramente, sin importar la posición que ocupaba dentro del
lote, y esperar a los momentos previos a la bajada de la bandera a cuadros. Una postura
similar adquirió Allende.

Último giro, apretado es poco, un sector clave del trazado es la variante 5, de izquierdas,
que te lleva a una recta y posterior curva final.
En la cabeza de “Leli” esperaba llegar a segundo allí, aprovechar la succión, ganar por dentro
en el frenaje, y salir primero. Todo muy lindo pero…..todos especulan. Quién va
liderar este último tramo??? Al parecer, nadie se atrevía.
Había que decidirse. El #31 toma la iniciativa y va al frente. Mantuvo la cuerda
esperando que alguno lo pase por afuera y pueda defenderse por el interno.
No terminó de pensar eso que ya lo estaba doblegando Santino Ponce por su izquierda.
Quedaba una sola chance. 7 pilotos habían salido de la 5 “en una baldosa”.

Arriban a180 km/h y tienen que frenar poco antes de los 50mts. Se acerca el cartel de
referencia, 60 mts por delante. Disponen un instante para decidir. A 180km/h se recorren 50
mts/seg Toda la maniobra durará dos/tres segundos.
No va más! Hora de resolver. Algunos fueron por el externo, otros arriesgaron, y (dos/tres)
adoptaron una medida más conservadora. De ellos, si bien todos ofrecieron un gran
rendimiento, quiero resaltar a Bagnarelli y a Allende. Mantuvieron cautela, primeros en frenar,
y anticipar la maniobra.

El de René Zanatta Sport me da la impresión que va “escaneando” y procesando el
desarrollo constantemente. Esa claridad, para mí, le permitió ir por la senda correcta.
Similar el caso del chaqueño quien había salido anteúltimo al rectilíneo, centrado, obtuvo su
premio.

Distinto es el caso de Facundo Suarez quien batalló y arriesgó para imponerse en la
tercera colocación. Viene evolucionando desde el año pasado ya que circulaba, en promedio, a
1,5/2 seg/vta del ganador, y este 2022 está en plena lucha.

Otro que voy a mencionar es a Lucas Gutiérrez (4to). El campeón de M.V. Sur, expectante,
esperó inteligentemente y se lanzó con mucha velocidad en el ingreso de la última curva.
Estuvo a centésimas.

Algunos dirán que podría ser para cualquiera. Tal vez sea cierto, no lo discuto. Con el “diario del lunes”,
me animo a decir que fue mérito a la “cabeza fría” en el momento más caliente de la carrera.

Fernando Chiesa
Muchas gracias Horacio Baumgratz (@motoclick.ar) por permitirme usar tus fotos