El campeonato obtenido por Juan Cruz Benvenuti debe festejarse, por razones
obvias, como cualquier otro logro de semejante magnitud.
Sin embargo, en este caso, el disfrute debe ser especial ya que significó el «broche de
oro» de algo que se gestó entre conductor y equipo, y evolucionó a lo largo del año
hasta llegar al máximo nivel en el momento justo.
Seleccionar el orden de alguna de las partes que conforman este exitoso conjunto
para comenzar a detallar es indiferente ya que todas poseen el mismo mérito pero
empezaremos por el Laboritto Jrs.
Uno de los mayores aciertos de la escudería es haber establecido una puesta a punto
que le permitió ser competitivos a lo largo de toda la Copa de Plata. De las 5 fechas que
integraban el calendario final, 2 eran lentas (La Pedrera y San Juan), 2 rápidas
(Olavarría y La Pampa) y San Nicolás que, en promedio, se ubicaba entre ellas pero el
diseño le caería mejor a su Torino.
Entonces, cuál fue el secreto? Poner en pista un vehículo que transitaba los
sectores trabados como si fuera un scalextric. Parecía no tener límites. En cada salida,
los registros caían elevando el nivel. Era cuestión de entrar a boxes y establecer otra
marca en la próxima sesión cronometrada. Tenían en claro el trabajo a realizar. A su
vez, no menos efectivo era el ritmo en carrera.
Algún punto flojo? Un poco más lento en las rectas de los autódromos veloces,
donde perdía, por dar un ejemplo en Olavarría, unas 2/3 décimas. Allí, era curioso ver
cómo autos con características opuestas al #96, que sacaban esa ventaja en «lo
derecho», luego terminaban anotando el mismo tiempo. Se compensaban.
Sin embargo, en el global, el Torino siempre fue referente, con un desempeño eficaz
a lo largo de la Copa, imposible de igualar por sus rivales. Incluso en los escenarios
donde la categoría debutaba.
Promedio de ritmo a largo de toda la Copa de Plata | |
0 | Benvenuti |
0,05 seg | Jakos, Andrés |
0,19 seg | Pérez Federico |
0,22 seg | Londero Ayrton |
0,24 seg | Micheloud Gustavo |
0,27 seg | Agrelo, Marcelo |
0,36 seg | Muchiut, Marcos |
0,37 seg | Gassman Joel |
0,69 seg | Ciantini Diego |
0,71 seg | Costanzo, Pablo |
0,75 seg | Sanchez Oscar |
Nota: es decir, si Benvenuti fué el más rápido, Jakos andaba
a 0,05 seg por vta más lento. Es un promedio de las 5 fechas
Es cierto que las dos últimas fechas los beneficiarían por su dibujo? Tal vez sí, pero
es un poco como el huevo y la gallina. Es fortuna o mérito del Laboritto Jrs extraer
dichas virtudes?, me inclino por lo segundo. Cualquiera hubiese alcanzado el título con
esta unidad? No lo creo, encontró a su socio ideal en Juan Cruz Benvenuti.
El angosturense se graduó de «piloto completo» durante este año. Demostró su
facilidad para adaptarse a los distintos circuitos ya que desde la primera práctica del
viernes era protagonista.
Por otro lado, expuso su velocidad a la hora de clasificar. Fue el mejor de todos a la
hora de afrontarla. Este no es un detalle menor ya que en una categoría tan pareja,
desperdiciar un par de décimas implica que numerosos oponentes te superen y
despidas de la lucha por el podio.
En general, explotaba el potencial en la misma vuelta, siempre cercano a su
«registro ideal»(virtud compartida con el auto).
Dif en segundos a ka hora de clasificar (promedio de toda la Copa de Plata) | Clasificaciones |
0 | Benvenuti |
0,14 seg | Ciantini Diego |
0,18 seg | Micheloud Gustavo |
0,19 seg | Gassman Joel |
0,22 seg | Jakos, Andrés |
0,26 seg | Agrelo, Marcelo |
0,28 seg | Pérez Federico |
0,50 seg | Muchiut, Marcos |
0,53 seg | Londero Ayrton |
0,68 seg | Costanzo, Pablo |
0,90 seg | Sanchez Oscar |
En las finales, asomaron otros puntos fuertes: la inteligencia y la madurez. Si
bien cuando tenía espacio lucía las facultades del conjunto, prácticamente en todas
las pruebas, en ocasiones, tuvo que trazar a la defensiva y mantener la calma.
Supo dónde está límite para mantener la posición y no forzó una maniobra que
implique un riesgo elevado. Además, eligió bien cuando atacar como, por ejemplo, La
Pedrera. Nunca pareció perder de foco su objetivo principal.
Por último, no quiero dejar de mencionar el aspecto psicológico. No es difícil
cometer errores cuando se encuentran en estas situaciones, peleando por la
consagración y con tanta carga encima. Hubo situaciones donde fue asediado por sus
contrincantes durante largos períodos. Sin embargo, cumplió con su tarea a la
perfección.
De esta manera, entre la perfomance del auto y la capacidad de Juan Cruz, se
formó una simbiosis que terminó de madurar en el momento preciso. Es por ello que,
luego de una impecable labor de cada una de las partes, deba disfrutarse de manera
especial. Con el sabor de haber hecho las cosas bien. Merecido título.
Fernando Chiesa
Fotos: Bh
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